El embarazo saludable está estrechamente relacionado con la salud de la mujer antes de la concepción. Como resultado, la atención previa a la concepción constituye la parte más importante de la atención prenatal, siendo el principio central la evaluación de posibles riesgos.
La atención previa a la concepción puede definirse como la provisión de intervenciones biomédicas, conductuales y de salud social para parejas antes de la concepción. Su objetivo es mejorar la salud materna, paterna e infantil, tanto a corto como a largo plazo.
Es una oportunidad para que tú y tu pareja mejoren su salud antes de comenzar a tratar de tener un bebé. Un profesional puede ayudarte a evaluar tu salud, estado físico y estilo de vida, para identificar áreas que debes mejorar.
La atención previa a la concepción puede ser útil si:
- Deseas descubrir cómo una enfermedad como la diabetes o la epilepsia puede afectar el embarazo.
- Tienes problemas para quedar embarazada.
- Existe el riesgo de que puedas transmitir una enfermedad genética, como la enfermedad de células falciformes o la talasemia, a tu bebé.
- Permita suficiente tiempo para la planificación y la atención antes de la concepción.
- Quieres aumentará tus posibilidades de quedar embarazada mejorando la salud de tu pareja y la tuya. Una mala dieta, sobrepeso u obesidad, fumar, beber y condiciones de trabajo poco saludables pueden afectar la calidad de los espermatozoides y evitar que quedes embarazada. Ambos deben intentar que su estilo de vida sea lo más saludable posible antes de intentar concebir.
- Si necesitas consejos sobre la atención antes de la concepción antes de intentar un bebé, tu médico de cabecera o una partera pueden brindarte más información. La atención previa a la concepción también es proporcionada por algunas enfermeras de práctica, visitantes de salud, clínicas de planificación familiar y clínicas de mujeres sanas.
Se puede lograr una atención preconceptiva adecuada e integral brindando consejos sobre el estilo de vida para optimizar la salud de la madre; proporcionar asesoramiento para optimizar problemas crónicos de salud materna. Así mismo, identificando parejas que corren el riesgo de tener un bebé con una malformación genética o cromosómica y empoderando a la pareja proporcionándoles el conocimiento suficiente para tomar decisiones informadas.
La atención previa a la concepción puede mejorar los resultados del parto, incluida la reducción de la cantidad de bebés que nacen prematuramente o que tienen bajo peso al nacer.
Pasos previos a la concepción
Con el objetivo de aumentar las probabilidades de tener un bebé sano, se recomiendan los siguientes pasos previos a la concepción:
- Haz un plan de vida reproductiva: la salud previa a la concepción se centra en las acciones que puede tomar, antes y entre embarazos, para maximizar las posibilidades de tener un bebé sano. Con este fin, se recomienda pensar seriamente en sus objetivos para tener o no tener hijos.
- Chequeo: con tu plan de vida reproductiva en mano, o al menos en mente, habla con tu médico sobre temas como su historial de salud, cualquier afección médica que pueda afectar tu embarazo, cualquier problema de embarazo anterior, tus medicamentos, vacunas beneficiosas y los pasos que debe seguir que puedes tomar antes del embarazo para prevenir ciertos defectos de nacimiento.
- Condiciones médicas: si tienes alguna condición médica, incluida artritis, diabetes, trastornos alimentarios, presión arterial alta, fenilcetonuria, trastornos convulsivos, enfermedades de transmisión sexual y enfermedad de la tiroides, es esencial que las discutas con tu médico para ayudar a controlarlas antes del embarazo.
- Comportamientos del estilo de vida: fumar, beber alcohol y usar drogas «callejeras» pueden causar nacimientos prematuros, defectos de nacimiento y muerte infantil. Si estás tratando de quedar embarazada y no puedes dejar de participar en estos comportamientos, tu médico puede derivarla a asesoramiento, tratamiento y otros servicios de apoyo.
- Medicamentos: tomar ciertos medicamentos durante el embarazo, incluidos algunos medicamentos recetados y de venta libre, así como suplementos dietéticos o herbales, puede causar defectos de nacimiento graves. Antes de quedar embarazada, habla con tu médico sobre qué medicamentos podrían ser dañinos.
- Vacunas: habla con tu médico sobre las vacunas recomendadas antes de quedar embarazada, durante el embarazo o después del parto.
- Ácido fólico: toma al menos 400 microgramos de ácido fólico todos los días, lo que puede ayudar a prevenir algunos defectos congénitos.
- Sustancias tóxicas y contaminantes ambientales: evita sustancias tóxicas como productos químicos sintéticos, metales, fertilizantes, repelente de insectos y excrementos de gatos o roedores. Estas sustancias pueden dañar los sistemas reproductivos de hombres y mujeres y pueden dificultar el embarazo.
- Peso: las mujeres con sobrepeso u obesidad tienen un mayor riesgo de complicaciones durante el embarazo, así como de desarrollar enfermedades cardíacas, diabetes tipo 2 y ciertos tipos de cáncer. Las mujeres con bajo peso también corren el riesgo de tener problemas de salud graves. Si tienes bajo peso, sobrepeso u obesidad, habla con tu médico sobre cómo alcanzar y mantener un peso saludable antes del embarazo.
- Historial familiar: comparte el historial de salud de su familia con tu médico. Con base en esta información, él o ella puede recomendar tomar ciertas precauciones, como someterse a asesoramiento genético.
¿Por qué necesitamos cuidados previos a la concepción?
Uno de los mayores desafíos en la atención previa a la concepción es que muchos embarazos no son planificados. Por lo tanto, no se debe perder ninguna oportunidad en el nivel de atención primaria para proporcionar asesoramiento previo a la concepción a las parejas en edad reproductiva, independientemente de su intención de quedar embarazadas.
Las mujeres que comienzan su embarazo con una salud subóptima no solo tienen un mayor riesgo de morbilidad materna y neonatal, sino que también aumentan la carga sobre los servicios de salud.
